5 consejos sobre tu espacio físico y psicológico

5 consejos sobre tu espacio físico y psicológico

La proxemia estudia el espacio físico y psicológico que separa a los humanos en el acto comunicativo, a cómo las personas usamos ese espacio vital, ese “yo” que se alarga unos centímetros cuando hablamos con alguien. Pero, ¿cómo saber si la distancia que mantienes con tu interlocutor es correcta? En este artículo te damos 5 consejos para que mantengas la distancia interpersonal adecuada según la ocasión.

1.- ¿Qué relación te une al interlocutor?

Esta pregunta parece obvia, pero hay personas que pueden extralimitarse o tomar más confianza de lo que deberían y no tienen en cuenta la relación que existe con su interlocutor. Está claro que no te comunicas de la misma forma con tu jefe que con un familiar o tu pareja. Y es que las distancias interpersonales se miden entre si son:

    • Distancia pública: (más de 3,5 metros) este tipo de distancia social es en la que no existe contacto sensorial: discursos, conferencias, relaciones formales
    • Distancia social: (desde los 1,25 metros hasta los 3,5 metros) en el siguiente escalón nos encontramos con esta distancia, propia, por ejemplo, entre compañeros de trabajo.
    • Distancia personal: (desde los 45 centímetros hasta los 1,25 metros) en esta distancia añadimos el contacto físico, como por ejemplo darse la mano. Sería la distancia propia entre amigos o familiares. Es un espacio en el que el círculo se estrecha considerablemente, así como el acceso a él.
    • Distancia mínima o íntima: (distancia inferior a 45 centímetros) es fácil detectar el grado de confianza que existe entre dos personas que se sienten cómodas manteniendo este estrecho espacio entre ellas.





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2.- Presta atención a las reacciones

No sólo se habla mediante palabras: el espacio físico puede decirte mucho acerca de la persona con la que hablas, así que presta atención. Fíjate si tu interlocutor reacciona intentando poner más distancia entre vosotros o si cruza los brazos o las piernas… En ese caso, intenta tomar distancia hasta averiguar cuál es la correcta, con cuál ambos os sentís cómodos.

3.- Cada persona es un mundo

Como decíamos al inicio, hay personas que toman confianza rápidamente y te hablan en distancias cortas, tocan y se expresan con gestos que envuelven al interlocutor; pero también hay personas que son totalmente opuestas a éstas, y hay que respetarlas. Es importante que detectes qué tipo de persona es tu interlocutor para no molestar o agredir con el espacio o no-espacio entre vosotros.

4.- Espacio físico y psicológico de otras culturas

Cada cultura tiene unas costumbres y unas reglas propias de comunicación. Si viajas o te reúnes con personas de otros países ten muy en cuenta cómo se comunican en su lugar de origen, infórmate y estudia un poco sobre ello, sobre todo si es una reunión de negocios. Lo que para un europeo del sur puede ser el pan de cada día, puede que para un japonés sea una ofensa.

5.- Cuidado con las distancias cortas

Cuando entramos en la distancia mínima o íntima corremos el peligro de sobrepasarnos. Ten mucho cuidado en este plano porque podemos hacer que el interlocutor se sienta intimidado.





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